COLECTIVOS PONEN EN
COMÚN SU POLÍTICA DE ACCIÓN CIUDADANA
El pasado sábado 10 de febrero, tuvo lugar un encuentro
abierto de colectivos sociales, vecinales y sindicales organizado por la Plataforma por la Remunicipalización de los
SS.PP. de Madrid.
La finalidad de este encuentro, al que podía asistir
cualquier representante de los colectivos y también personas a título personal,
fue tomar el pulso que viven cada uno de estos colectivos en su labor presente
para conocer las distintas realidades y
abordar la implantación de canales comunicativos e informativos que puedan
conectar las distintas luchas sociales.
El ámbito del debate fue Madrid y su provincia, las
exposiciones muy diversas. En este encuentro se encontraban representadas las
AA.VV. de Carabanchel Alto, La Elipa, Quintana, Valdebernardo, Centro, La Flor
Fuencarral / El Pardo, Goya Dalí – Barrio de
Salamanca, Plataforma Quinta Torre Arias, Plataforma Marea
de Residencias,
Plataforma Maravillas Malasaña / Universidad, Plataforma de
Servicios Sociales, Plataforma Unitaria del SAD, Somos Sindicalistas Agencia
Tributaria y personal funcionario de zonas verdes, Cobas EMT y Centros
Deportivos, CGT Administración Pública y Jardinería, Educadoras de Salud
Mental, Personal de Centros Culturales, Representantes a título personal de
Podemos y la Plataforma organizadora mencionada anteriormente.
La relevancia de las distintas exposiciones, dejaron claro
las consecuencias de las políticas neoliberales que imponen los gobiernos
municipales y autonómico respecto a los servicios públicos esenciales.
Gobiernos de distintas siglas, acentuado sobre todo por PP y PSOE, aunque
gobiernos de coalición, sobre todo conservadores y de extrema derecha, imponen
su ideología privatizadora de los ss.pp. causando de esta manera, el deterioro
de los mismos, la insatisfacción de usuarios/as y el cercenamiento continuo de
derechos laborales de las plantillas de las concesionarias.
Desde hace años, se ha sumado a la estrategia de fijación
en los servicios públicos de grandes conglomerados empresariales de la construcción, el de
los fondos buitres que, conjuntamente en una espiral codiciosa, consiguen
adentrarse con la ayuda y complicidad política en la gestión de los servicios a
los que nos referimos. Las personas y organizaciones que estuvieron en este
encuentro, así lo sienten, sobre todo porque muchas de ellas son
trabajadores/as en estos servicios. Sin duda alguna, los casos más acuciantes y
sangrantes, se dan en el sector de servicios sociales.
En las diversas miradas y análisis del encuentro, como
factor común, se apostó por una gestión directa sin intermediarios de los servicios públicos siendo esta más barata en igualdad de condiciones, más eficiente y más
justa. Igualmente, hubo consenso en la necesidad de apostar por los servicios públicos como
generadores de igualdad cuyo rédito ha de ser la calidad y no la cuenta de
resultados de empresas privadas. La inversión en nuestros servicios públicos
nunca será un gasto si está destinada a la eficacia y a la eficiencia en la
cobertura de las necesidades de la población, sobre todo la de aquella parte
con menos recursos.
Fueron significativas las exposiciones de las
representantes de la Marea de
Residencias, de la Plataforma Unitaria del SAD, de las
educadoras de salud mental o de las trabajadoras de Centros Culturales. Los
dramas personales expuestos ante la tragedia que se vivió durante la pandemia y
las muertes de mayores en residencias de la Comunidad de Madrid, así como su
solitaria lucha para aclarar todo lo sucedido y la búsqueda de justicia encoge
el corazón. Esta Plataforma tiene un calendario muy intenso de movilizaciones,
algunas durante este mismo mes. Las calamidades laborales del personal del
Servicio de Ayuda a Domicilio, su vulnerabilidad ante una lógica impuesta que
es todo menos lógica y decente, y la lucha y organización de años para intentar cambiar estos aspectos,
es demoledora. Así mismo, las condiciones laborales de las educadoras de salud
mental para poder satisfacer las necesidades de usuarios/as, los continuos
convenios colectivos de mínimos que imposibilitan vivir de manera digna, hacen
sentir la incomprensión de la política profesional y también del sindicalismo
mayoritario que pelea en primera instancia por defender su lugar en un sistema
injusto. Las trabajadoras de centros culturales son víctimas de unas
condiciones laborales deplorables, de las que no permiten vivir de un sueldo.
En el lado positivo, la organización de personas activas de
diferentes sindicatos, AA.VV. y otros
colectivos por denunciar las políticas que caminan hacia la continua
privatización de los Centros Deportivos, es admirable. Se lleva trabajando
durante meses en la recogida de datos y realidades que sufren los centros
deportivos en Madrid. La ausencia de inversión, de programas efectivos y la
falta de una apuesta clara por dar opciones saludables a la ciudadanía, es otro
asunto importante.
El encuentro, sin duda, alcanzó sus objetivos. Lo
importante es la clara realidad de personas y colectivos que, en el substrato
social sin acceso o posibilidad de llegar a ser en el corto plazo un actor
principal en la vida pública, no deja de plantear situaciones para cambiar este
aspecto. Colectivos y personas, no solo los que estuvieron en este encuentro,
que quieren hacer política para mejorar situaciones, contextos y realidades
que, hoy por hoy, denuestan a una parte muy amplia de la ciudadanía y de los
trabajadores/as.
La participación y la implicación, así como la reflexión y
el análisis, son herramientas poderosas que han de servir a la clase
trabajadora para revertir la situación de opresión, engaño y utilización que
llevan a cabo el poder financiero, empresarial y el departamento político que está a su servicio.